domingo, 31 de octubre de 2021

Limp Bizkit "Still Sucks" (2021) - Reseña en Español

     Los que seguimos y escuchamos desde siempre esta banda de un pueblo austero de Estados Unidos -ahora mudado hace décadas a L.A; al mercado global y a los festivales europeos - sabemos que hay una gran capacidad de improvisación en el cantante/lider Fred Durst. Desde el pico de fama de la banda en el año 2000, la improvisación y el cambio ha sido la única constante de todas las idas y vueltas de esta banda.
    Durst; el mismo que por 2005 estuvo 3 o 4 años (no quiero saber si fueron mas) prometiendo en las redes un disco nuevo que nunca saldría a la luz (no tenían guitarrista!). Durst; el mismo que al promocionar un disco inexistente se veía forzado a subir a la nube temas viejos, b-sides, en myspace.com con la venta de que era algo fresco.
   Durst, el mismo que unos años antes antes había grabado un disco entero con él como guitarrista, para después volverlo a componer -marche la cuenta para la discográfica- con Mike Smith (ex-Snot y Britney Spears). Durst, el mismo que en ese entonces lanzó desde la nada un disco EP (The Unquestionable Truth Part 1) prometiendo una segunda parte que... nunca salió y que, al no tener éxito comercial, filtró un video de él teniendo sexo sin lograr consecuencia alguna.
     Durst, el mismo que dos o tres veces tuvo que cumplir compromisos discográficos con grandes éxitos o discos en vivo. Y el  mismo Durst que últimamente durante estos años publicó los singles del nuevo disco (La Estampida del Disco Elefante) para, al final... lanzar el disco bajo otro nombre y.... sin esos singles.

    ¿Debería todo esto importar? Quizás no. Pero sabiendo lo retorcido que puede ser la experiencia Bizkit (miembros que se van y vienen, promesas comerciales falsas, conflicto legales con discográficas) escuchar un disco nuevo lanzado de la nada es todo un desafío. Y es que cuando un músico entra en esa circulo destructivo donde no puede trabajar más con otros seres humanos (reflejado en todo lo que decimos antes), bueno... ¿qué se puede esperar de positivo? Lo sublime surge de las sociedades, y por eso los músicos conflictivos quedan extreñidos y disminuidos artísticamente.

    Con ese historial, uno pone play al nuevo “Still Sucks”, titulo que adelanta que nada de todo esto cambió para mejor. Sin embargo; el disco... poco tiene de “sucks”.

    Ya viendo el arte de tapa creado por Borland, podemos deducir que sin dudas este es el momento más independiente de la banda, totalmente autogestionado. El disco, en su sonido y estilo, lo confirma...volviéndolo distinto al resto de la discografía y al resto de los discos nuevos que una banda de este calibre pueda presentar.


    “Out Of Style” y “Dirty Rotten Bizkit” abren el disco con una auto-conciencia de la formula comercial del éxito de la banda que hace imposible rechazarla. Abrir un disco al grito tribal new-metalero del “Dj lethaaaal!” es como Tarzan golpéandose el pecho para reunir a su manada de gorilas sobrevivientes. El llamado es aceptado. La reunión tribal se lleva adelante. “Dirty Rotten Bizkit” es el premio por confirmar asistencia. Si ya amábamos el talento de Wes Borland, escucharlo con una afinación mas grave -o una guitarra de siete cuerdas, probablemente- es una cuenta pendiente que se paga en cash en el acto. Entre tanto moderno mercado de trap, de perreo y selfie, es lindo escuchar algo nuevo pensado para el smosh. Sinceramente, la violencia de los riffs me dejaron atónito. Absolutamente pesado. El clima de este segundo tema es tan exitoso que uno se pregunta hasta cuando se mantendrá la magia del disco.

    Y la sospecha no es injusta. Incluso es certera. Después del single “Dad vibes”, empiezan a surgir las canciones relleno, compuestas por un beat del dj o canciones donde claramente el guitarrista es Fred Durst como ya alguna vez pasó. Son canciones similares  a las canciones más mediocres del disco del 2003, “Results May Vary” (“canciones de solista” llamo peyorativamente el en ese entonces ex-miembro Wes Borland). Sin embargo, estos temas relleno – la mitad de los tracks del disco- no son del todo negativos. En las épocas gloriosas de la banda serian hidden tracks exitosos; es decir, serían parte de la obra. Es por eso que “Still Sucks” parece un disco corto, pero de los buenos.

    Como para darse el gusto de una vez por todas el album cuenta con 2 tributos a los gustos predilectos de Durst: “Barnacle” y “”You Bring Out The Worst In Me”. El primero cuenta indudablemente con Durst en la guitarra y es un tributo a Kurt Cobain, un tema totalmente nirvanesco. El segundo, un tributo al Chino Moreno y las composiciones más esenciales de Deftones. El beat de bateria, la diagramación de la canción, los falsos post estribillos son prueba de eso.

    Sobre el final del disco suena una conversación telefónica entre un personaje ficticio interpretado por Durst y Wes Borland. Este personaje ficticio, es en evidencia el personaje que Durst interpreta en vivo desde ya unos meses y con el que llamó la atención de los medios y las redes europeas. El bigote, el pelo sin forma, los lentes de color, la ropa... Un nerd, un mediocre, sin estilo, con la cabeza llena de mierda. Esta personificación de Durst, esta burla al consumidor más estúpido del mercado, sea quizás la razón de porqué la banda haya enfilado al territorio independiente y auto-gestionado. ¿Sin motivación externa? ¿Desbordado de tanto demandante superficial? Es inteligente, y probable.

    Los beats del Dj Lethal -literalmente la mitad del disco, 15 minutos- son lúcidos, recuerdan la época gloriosa de House Of Pain y esa hermandad real con Cyrspress Hill. Es quizas, la lucidez artistica del Dj Lethal lo que sostiene a "Still Sucks". Lejos de las épocas gloriosas donde la banda componía como tal dentro de un estudio, este album parece ser la sociedad del Dj con Durst, variando con tres o cuatro composiciones junto a Borland y al resto de la banda. Sin embargo; esto no es un problema. La frescura de Lethal es verídica y su criterio estable a lo largo de los 30 minutos del disco hacen a la experiencia llevadera. Parecería un disco solista de Durst, producido y compuesto por Lethal, y con la participación de Borland. 

    Mi sorpresa fue el ultimo tema, “Good Bye”. Al comenzar pensé que era una burla a un tema muy conocido de Cristina Aguilera. Después comprendí que era una canción sincera. Y quizás la mas sincera de la banda. “Good bye, is time to go...” pareciera despedirse Durst de su audiencia. ¿El retiro de la banda? ¿Una intuitiva carta de despedida de la vida? ¿Un agradecimiento al mundo que tanto les dio? “Adios, Adios, te deseo lo mejor / Adios, adios, te deseo felicidad / Adios, adios, esto es para mi mismo / Adios, adios, siempre te desearé lo mejor” son las ultimas palabras que suenan antes del silencio final del disco.

    Es posible que éstas últimas sinceras palabras resuman todo “Still Sucks”. No veo una razón comercial para el lanzamiento -no contiene hits, no da pie a ninguna gira de promoción, no busca clics. Por ende, ha de tener un valor diferencial, posiblemente personal. Un "Adios".

   De ser una despedida... si, Fred; es una buena. Un festejo de tanto new-metal, de tanta estupidez y alegria y de emociones dramáticas y vigorosas. Si; una despedida improvisada a tu estilo, pero de calidad. Si es una despedida, es una corta, pero de las buenas.

    Sea lo que sea, no apestó. Nunca.